Riesgos de utilizar duchas vaginales

La higiene es fundamental para nosotras, sobre todo cuando se trata de nuestra zona íntima. Existen diversos métodos para evitar malos olores e irritaciones, pero todos no son recomendables. La ducha vaginal, por ejemplo, consiste en introducir una mezcla líquida, regularmente compuesta por agua o algunas sustancias antisépticas. Aunque muchas mujeres optan por esto procedimiento, algunos especialistas lo consideran innecesario y peligroso, ya que interfiere con la limpieza natural de la vagina.

Más de 30% de las mujeres en Estados Unidos usan estas duchas y afirman sentirse frescas, señalando que lo hacen para eliminar bacterias, olores, residuos menstruales y como método de prevención ante cualquier enfermedad de transmisión sexual.

Efectos negativos

Los riesgos que ocasiona el uso de duchas vaginales son diversos:

– Incrementan el riesgo de desarrollar infecciones, como la vaginosis bacteriana.

– Ocasionan alteraciones en el pH de la vagina.

– Este producto también acelera la aparición de enfermedades pélvicas en un 70%, inflamando el útero, las trompas de Falopio y los ovarios.

-El método también genera complicaciones para quedar embarazada y aumenta el riesgo de una gestación ectópica, es decir, cuando el embrión se ubica fuera del útero.

Recomendaciones

Hay opciones para mantener tu zona íntima libre de irritaciones y bacterias. Ten en consideración lo siguiente:

-Utiliza jabones neutros cada vez que te des un baño.

-Adquiere productos especiales y medicados, cuyas fórmulas sean las más adecuadas para tu piel.

-Ten a la mano toallitas diarias. Por lo general, tienen olor y son ideales para contrarrestar malos olores.

-Limpia la vagina y el ano para evitar infecciones.Debes hacerlo de adelante hacia atrás.

-Mantén buena higiene durante la menstruación y después de tener relaciones sexuales.

-Visita a tu ginecólogo y sigue sus indicaciones.

Fuente: DC| EDM