Los dolores de Jesús en la Cruz,
Experimentar el sufrimiento de la madre al pie de la cruz es de inexplicable sentimiento de impotencia y congoja.
El sufrimiento moral de las burlas, la incomprensión y el distrés en una agonía lenta e injusta.
Las moscas, los mosquitos, los perros y zamuros que pululaban alrededor de la sangre de los condenados es de asco terrible.
El estado febril por la pérdida de sangre que inicia la infección e inflamación de las heridas.
El roce del cuerpo flagelado con la áspera cruz es todo un suplicio insoportable.
Los retorcimientos buscando alivio o sobrevivencia en la cruz son un tormento inexplicable.
La ardiente, ardorosa y febril sed. Produce una fiebre corporal insoportable y una trasudación insensible.
Las violentas y dolorosas tracciones necesarias para evitar la mortecina asfixia.
La lesión del tronco mediano que conlleva a espasmos, contracciones de tendones y músculos con tetanizaciones y dolores.
La lesión del nervio mediano por el clavo de las manos que lleva a la pérdida del conocimiento y una hipotensión brusca.
Fuente: DC|Padre José Palmar / @PadreJosePalmar