Ghana: Ser el mejor y que nadie lo sepa (Grupo G)

El problema de no tener gran nombre es que para tener el reconocimiento de los que si lo tienen, tienes que esforzarte el triple que ellos aun cuando tus méritos sean más relevantes. Otro problema es que los que tienen fama no les perjudicará tanto las adversidades, ya que por el cartel que tienen esta puede ver disminuida su intensidad, mientras que el que no es tan conocido, vive su infortunio más pequeño, como una autentica tragedia. En el fútbol africano quien representa esto último, es la selección de Ghana.

El combinado africano ha sido a lo largo de historia una de las mejores selecciones que ha existido en el continente negro, siendo dueños de 4 copas africanas (solos superados por Egipto), y habiendo conseguido la mejor actuación de cualquier equipo de dicho continente en una copa del mundo, al llegar a unos cuartos de final, y ser eliminados por la impredecible tanda de penales.

 

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Hacedores de magnificas figuras que han deleitado los campos más importantes del orbe futbolístico, Ghana se antoja como la gran esperanza de la causa africana tanto en el    presente como en el futuro, ya que si su selección mayor es grandiosa, la juvenil es actualmente la mejor que existe en su federación, asegurando que la visión a largo plazo que   puedan tener los ghaneses, será aun más gloriosa que la actual. Sin embargo nadie más que ellos parecen estar conscientes de esto.

Sucede que Ghana por diferentes razones no se ha ganado el reconocimiento mediático que otras selecciones de menor nivel si tienen, aun cuando se han cansado de    demostrar que si alguien ha mantenido en alto la bandera del fútbol de África, han sido precisamente ellos y no otros. Ellos, de llegar a obtener resultados similares a los de su    mundial pasado, verán su gesta denominada como “sorpresa” por los medios, a pesar de que sería un hecho acorde al nivel que poseen.

Con grandes jugadores como Gyan Asamoah, Kevin Prince Boateng, o Michael Essien, los ghaneses llegan al certamen mundialista una vez como la mejor selección de su continente, llegando a destrozar en el playoff de su confederación, a otra gigante como Egipto, aplastándola 6 a 1 en el primer juego.

Lejos de ser la estereotípica selección africana, Ghana combina la potencia física con la calidad individual, llegando incluso a desarrollar la mayor falencia que aquejan a las demás escuadras de su continente: el orden táctico. Y es que gracias a la mano del serbio Goran Stevanovic, las llamadas “águilas negras” logrado constituir su grandeza en ese aspecto, convirtiéndoles en un equipo que a pesar de estar en un grupo bastante complicado, tiene el nivel suficiente como para clasificar.

Su técnico actual, Kwesi Appiah, está claro en ello, y ha trabajado celosamente por mantener la base disciplinaria en los jugadores, a sabiendas de que solo con ella podrán convertirse en la mejor selección africana de todos los tiempos, y de esta forma, empezar a tener el reconocimiento que merecen, y callar las bocas de quienes nunca vieron en Ghana, el gigante que es.

Fortalezas: Potencia física, velocidad en todas sus líneas, y un importante orden táctico.

Debilidades: Una defensa vulnerable por su juventud e inexperiencia.

 

 

Luis Orozco/DC/@diariocontraste

 

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