Samán: participación del pueblo es la clave contra la corrupción

 «Es muy importante que el pueblo se una a esta lucha», recalcó, al tiempo que manifestó la necesidad de que los venezolanos comprendan el origen del desabastecimiento.

En ese sentido, Samán mencionó que es evidente que las alzas del desabastecimiento y el sabotaje a la economía en el país se producen generalmente días previos y posteriores a las campañas electorales y a los comicios, maniobra usualmente utilizada por la derecha, denunció.

Es por ello que con la reestructuración del Indepabis nacen los Amigos del Indepabis, agrupación de personas acreditadas para persuadir cuando se presente un problema sobre especulación. Ellos tendrán una línea directa con la Dirección de Fiscalización, desde donde se enviará a un fiscal al lugar para resolver el problema en el sitio.

Los Amigos del Indepabis –ubicados en la cuarta línea que apunta a la reestructuración del instituto– tendrán puntos específicos de atención y supervisión de la prestación de servicios y bienes de consumo, por ejemplo, precios en clínicas, líneas aéreas, vehículos, entre otros.

A propósito de la credencial para los “Amigos del Indepabis”, y de la posibilidad de que esta se preste para actos de corrupción, Samán dijo que solo se le entregará a “personas de cierta edad con solvencia moral reconocida. Vamos a crear un núcleo de 400 amigos del Indepabis para la formación”.

Eduardo Samán explicó que una de sus primeras medidas para optimizar el funcionamiento de la institución es el combate directo a la corrupción. Por eso explicó que, de los 23 coordinadores que encontró a nivel nacional, solo ratificó a dos al asumir el cargo.

Opinó que “para que existan unos corruptos, se necesitan unos corruptores y estos son los empresarios que les ofrecen dinero. Eso habla de la poca formación que tienen en la ideología marxista, un revolucionario pues no ama el dinero. Para mí el dinero es solo para sobrevivir, pero no es un valor importante para darse lujos… Por efecto dominó, se llegará a los peces gordos de la corrupción”.