El hecho ocurrió la noche del pasado jueves, cuando el joven visitaba a la muchacha, cerca de donde residía con su espora y llegaron unos delincuentes a robar.
La víctima se negó a entregar sus pertenencias y los malandros no dudaron en dispararle en múltiples ocasiones. Se llevaron su cartera, el anillo y el celular.
Asnoldo Bravo, padre, aseguró que lo mataron por negarse a entregar sus cosas.
Contó que al enterarse que su hijo estaba malherido fue a buscar el carro para llevarlo al centro de salud más cercano, pero al llegar ya unos vecinos lo habían auxiliado.
Lo trasladaron al Materno de El Marite, donde ingresó sin signos vitales.
Deja un hijo de un año y el menor de cuatro hermanos.
Era bachiller. Estaba gestionando los trámites para inscribirse en el curso para Policía Nacional Bolivariana.
DC