ARIAS SE VOLVIÓ A EQUIVOCAR

Pretender solucionar un problema con medidas que parten de controles ilógicos no iba a resolver el desabastecimiento en el Zulia, ni en ningún otro estado o ciudad del país; y en eso está claro el gobernador de Táchira, José Vielma Mora, quien manifestó que “para el Táchira tener una tarjeta de racionamiento o algo así, no es lo más deseable”.

El gobernador del Zulia está viendo sólo una parte del problema y prefiere castigar al pueblo.

La semana pasada fui enfático en denunciar que los zulianos no nos merecíamos hacer interminables colas en las afueras de un supermercado, que nos marcaran como reces, que nos colocaran un chip o que nos aplicaran el Sistema de Automatizado para la adquisición de productos de la cesta básica, que por cierto, se simplifica en una tarjeta de racionamiento ante la incapacidad de producir alimentos para todos por igual. También pedí que nuestros militares resguardaran más la frontera para que esos alimentos no pasaran al país vecino.

Escuché unas declaraciones de la periodista y articulista, Milagros Socorro, quien manifestó su desacuerdo sobre cómo Maduro desautorizó a Arias en cuanto a la aplicación de ese plan de racionamiento alimentario; y estoy de acuerdo con la comunicadora, pero mepregunto ¿Porqué no se consultó con el Ejecutivo nacional la supuesta normativa? Pareciera que estuviéramos en presencia de un plan improvisado.

Este Gobierno destruyó la capacidad de producción de este país.  Acabó, por ejemplo, con los centrales azucareros y ahora tenemos que  importar azúcar. Además importamos 79% del café que consumimosy ni hablar de la carne, cuya importación está por el orden del 52%. Si producimos más, seguro estoy que no tendríamos desabastecimiento, ni «bachaqueo».

El sábado pasado quedé asombrado al ver cómo los ocupantes de una camioneta blanca esperaban, a las afueras de un Bicentenario, a las personas que iban saliendo para que les entregaran las bolsas con artículos de la cesta básica a cambio de 150 bolívares. Ese es el pago que recibe cada ciudadano conocido como “bachaquero” por hacer una cola y comprar los productos regulados.

Para el jefe o “bachaco” mayor es un negocio rentable, con tan sólo vender un paquete de harina PAN en Colombia se le cancelaría a esa persona. Por eso ahora hasta las señoras de servicio doméstico están escasas, porque muchas prefieren “bachaquear”.

¿Por qué las autoridades no están haciendo nada al respecto? ¿Por qué esta información la sé yo y ellos no? ¿Por qué está ocurriendo tan cerca de la Residencia Oficial y no se hace nada?Claro está, hemos escuchado a las mismas autoridades regionales decir que se han decomisado más de 3.500 toneladas de comida, que han detenido a casi una docena de personas que se dedican al “bachaqueo” de comida, entre otras tantos “resultados” que han dado a conocer.

Con el tan cacareado Sistema de Racionamiento, lo que se pretendía era controlar al ciudadano, crear una base datos para saber qué hacemos, qué comemos, dónde vivimos, para ubicarnos en el momento que lo necesiten.

Señor Gobernador, ustedse volvió a equivocar. No se puede ir contra un pueblo de manera improvisada. En tiempos de inmediatez de la información y redes sociales queda registrado todo lo que se anuncia y hace. En política los errores se pagan muy caros, recular no es lo mismo que rectificar.