Los rostros nuevos

Entre unos y otros, aparece un sin sabor que muchas veces responde a un perfil que no logra engranar en las exigencias del papel a desempeñar. Sea por madures personal, preparación o resultado de imposiciones de un momento dado, que luego se convierten mas en una calamidad para los procesos que determinan la política. Estos casos aparecen como resultado de lo mencionado en la vida del país. Pero por otro lado, muchos que llaman “cara jóvenes”, poseen un bagaje de muchos años, en sus haberes gubernamentales.

El tema entonces no deberá centrarse en edad cronológica, sino, en rostros que logren ofrecer un inventario de potencialidades que ética e intelectualmente pueda ofrecer conjuntamente con la honestidad y la amplitud, las posibilidades de gobernar con un sentido grande en lo que es la política y la praxis del poder. Cuestionar a un dirigente por la edad, es un acto de irresponsabilidad. ¿Nuestros abuelos, padres y tíos, por ser mayores  no dejan de ser genuinos administradores de la familia, o sí?

El asunto que centra la discusión realmente es el tema de las potencialidades de un dirigente o líder político, nos lleva a  escudriñar tales atributos en un camino acertado para su escogencia o no. Su capacidad de renovar sus ideales, estar a la vanguardia de los momentos, no tener complicidades con el pasado y poseer un ideal que lo convierta en una poderosa bandera de lucha, son parte de estos inventarios en los rostros nuevos.

La medición se hará entonces en los potenciales y reales aportes que logre ofrecer. Para nadie es difícil de entender como figuras con tal perfil, no varían en el tiempo y más aun son necesarios en el devenir de la política nacional que exige cada vez un representación firme y profunda de sensatez en sus acciones. Es por ello, que en los momentos duros del acaecer político, el ciudadano deberá buscar en estas apreciaciones y hechos el camino acertado al decidir su apoyo.

 Finalmente, las grandes crisis ofre­cen oportunidades múltiples a los pueblos, pues plantean en los escenarios políticos una fervorosa reforma ética, ideológica e institucional. Una nueva conciencia histórica basada en nuevas tesis acontece en el país y transmutan los valores en su quehacer diario; la Libertad, la Justicia y la Equidad, pasan a ocupar los roles en la vida política de la Nación. Es entonces que las fuerzas generadoras del porvenir basadas en los compromisos, desafían el recrudecer de las acciones inmorales que apuntalan las malas prácticas.