Los roba tiempo, por Jesús Castillo Molleda (@castillomolleda) 

En Venezuela la fuerza productiva en la economía formal e informal está perdiendo horas en la realización de diferentes trámites administrativos que los ciudadanos deben ejercer diariamente. En un trabajo de observación realizado por la Fundación Zulia Productivo desde el 18 al 22 de mayo de 2015 en los Municipios Maracaibo, San Francisco, Santa Rita, Cabimas y Machiques del Estado Zulia en entidades bancarias, compañías de seguros, universidades, registros públicos, casas parroquiales de iglesias , seguro social, la cruz roja, Saime, oficinas de Corpoelec e Hidrólago, instituto de transporte terrestre, empresas de envió de encomiendas, paradas de transporte público, consultorios médicos, ferias de comidas, líneas de taxi, auto mercados, ventas de cauchos, ventas de baterías, empresas de telefonía móvil y fija, empresas de televisión por cable, clínicas y hospitales, estaciones de servicio, puesto de control del puente sobre el lago, tribunales, cementerios, estacionamientos privados, terminales de pasajeros, farmacias,  aeropuerto la Chinita,  oficinas de las alcaldías de los municipios Maracaibo, San Francisco, Cabimas y la gobernación del Estado Zulia, con el objetivo de determinar las horas que pasa un ciudadano en tramitar o solicitar algún servicio en los entes antes mencionados, se obtuvieron resultados que denotan la poca vocación de servicio y atención brindada.

La calidad de servicio al ciudadano es de muy baja calidad, los usuarios pasan necesidades debido a estructuras no adecuadas, personal con baja autoestima y poca preparación para las funciones asignadas, ausencia de salas sanitarias, filtros de agua, las salas de espera existentes en su mayoría no cuentan con los servicios y espacios mínimos requeridos, ausencia de personal que se encargue de informar y responder a cualquier eventualidad, en muchos de los casos, después de que un ciudadano pasa horas esperando para ser atendido le informan que el producto no lo hay, que esa no es la oficina que le pueden atender el requerimiento, que vuelva otro día porque la persona encargada del trámite o el que firma no está, muchas de las repuestas que reciben los usuarios es “¿qué quiere que haga yo señor?, si lo que soy es un simple empleado”, mal pagado, inclusive algunos funcionarios son capaces de inducir al usuario a que no pierdan el tiempo porque es difícil que le resuelvan el requerimiento, o no hay recursos económicos, o es mejor que busque a un gestor, si usted quiere que le paren debe hablar con tal persona, entre tantas repuestas fuera de contexto.

En esta realidad, las voces ausentes de concejales, diputados, autoridades locales, regionales y nacionales, es alarmante, los ciudadanos navegan solos en un mar de tiburones. Para muchos servidores públicos y privados la repuesta es sálvese quien pueda. Sin embargo, para el ciudadano esas horas y días son muy valiosas, para los que dependen de su trabajo en libre ejercicio y no dependen de un salario las pérdidas de tiempo, se traducen en pérdidas económicas. Mucha gente ya ni reclama porque de hacerlo, en muchos de los casos, le atrasan más los procesos. La anarquía crece. En el estudio se observó, que sólo el 1 de cada 10 servidores públicos y privados ejercen sus funciones con profesionalismo, ética y ganas de servir, pero a su vez se evidenció que dicho comportamiento es más personal que institucional.

Bajo este contexto, una propuesta para los legisladores sería una ley que regule los tiempos de atención y de no cumplirlos se les debería pagar una indemnización a los usuarios. Asimismo, para que todo esto mejore los ciudadanos deben organizarse y exigir sus derechos para lograr obtener atención de los entes responsables, de no hacerlo la pasividad de los actores políticos y públicos seguirá en detrimento. La clase política que gobierna y la que se le opone, están dejando atrás los intereses colectivos que es la función principal de su trabajo, y se concentran en los intereses personales. Como lo dijo Benjamin Franklin “Si el tiempo es lo más caro, la pérdida de tiempo es el mayor de los derroches”.  No dejes que te roben tú tiempo.

DC / S.H. Jesús Castillo Molleda / Profesor Universitario, Politólogo, Coach Político, Locutor / jcastillo@fundacionzuliaproductivo.com / @castillomolleda