Cibernautas deben generar cambios e influir en la toma de decisiones de los gobernantes

En el Foro Económico Mundial en Davos, los Global Shapers del Hub Caracas fueron seleccionados para propiciar un debate sobre ¿Quién es el dueño de Internet? y la Gobernanza en las Redes Sociales. Concluyeron que el cibernauta debe generar cambios y educarse, además  le corresponde comprometerse a influir en la toma de decisiones de los gobernantes con su participación.

Por América Latina fueron seleccionados venezolanos y mexicanos, junto con Global Shapers de 40 ciudades, cuyos debates serían transmitidos a la audiencia en Davos. La sesión contó con la participación  de Ana Isabel Otero, directora de Analiticom; César David Chirinos, presidente de la Fundación Ciudades Digitales;  Luis Carlos Díaz, coordinador Centros y Redes Gumilla, Jorge Berrizbeitia, ex presidente del Centro Nacional de Tecnología de Información, y de Laureano Márquez como moderador.

En el encuentro señalaron que Internet no es de nadie. Que a través de las redes sociales la ciudadanía gana visibilidad y poder. Otero indicó que hay un grupo de “influenciadores” con gran poder que puede intervenir en decisiones y posicionar trending topics a su parecer, aunque en el mundo real estas personas sean desconocidas.

Agregó que hay una incipiente autorregulación en las aplicaciones con temas de edad, pero es insuficiente. Señaló que corresponde al hogar, la escuela y gobierno educar a las nuevas generaciones sobre el uso de las redes sociales, contenidos, manera de relacionarse y actuación. “Es la nueva forma de relacionarse, pero hay que establecer protocolos”.

Los expertos coincidieron en que en Venezuela 50% de la población no tiene acceso a Internet y que el país cuenta con el peor ancho de banda del continente, sin embargo, los usuarios socializan  haciendo uso de teléfonos móviles muy costosos que los mantienen interconectados. Por esta vía expresan su opinión sobre el acontecer y los problemas que aquejan a su comunidad.

Chirinos añadió que la democracia se manifiesta en el ímpetu de los ciudadanos para trascender a las redes sociales y mostrar su opinión en el mundo real, lo que se traduciría en cambios.

Díaz manifestó que el Estado debería regular en Internet la pederastia, el terrorismo y los fraudes bancarios. “Su participación en otras áreas sería muy peligroso”, afirmó.

Berrizbeitia refirió que en la medida que haya más iniciativas surgirán modelos de autorregulación. El reto es la participación ciudadana y no dejar la responsabilidad al gobierno, indicó.

DC – EU

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