Claves para la seguridad de los venezolanos: Impunidad y desarme

Los elevados y alarmantes índices de impunidad que reinan en nuestro país mantienen en zozobra a cada uno de los venezolanos quienes temen por sus vidas y la seguridad de los suyos, se habla de desarmar a la población e imponer castigos más severos a los antisociales que día a día atentan de forma macabra contra nuestro sentido de seguridad y conservación.

Según expertos en la materia, la impunidad ronda el 90% Elio Gómez Grillo, abogado, docente y padre del penitenciarismo, considera que la solución a este problema es “muy compleja”.

“Por años, se han mantenido los mismos factores, el punto de partida de la delincuencia está en la infancia, personas que a falta de un hogar caen en manos de otros que los empujan a cometer delitos. Otros factores determinantes son la droga que llegó en proporciones alarmantes, la impunidad y también la posesión de armas de fuego, esto es un problema estructural”. Un problema tan complejo que fue abordado por los distintos factores políticos, durante una reunión que obligó al oficialismo y oposición a sentarse en una mesa a dialogar, sincerarse y proponer salidas al conflicto, como la creación de un plan nacional de pacificación, propuesto por el presidente Nicolás Maduro. Según la Organización No Gubernamental, Observatorio Venezolano de Violencia, el 2013 cerró con un estimado de 24.763 muertes violentas y una tasa de 79 fallecidos por cada cien mil habitantes. Resaltó que se hacen esfuerzos constantes a través de políticas como la misión A Toda Vida Venezuela, dispositivos como Patria Segura, que buscan articular a todos los organismos, el despliegue de militares y de la Policía Nacional en el país y también el Patrullaje Inteligente en los municipios con mayor índice de criminalidad. Según el OVV, en el 2013 se observó un incremento en ciudades medianas y pequeñas, hacia donde se desplazó el delito violento. Las muertes violentas representa el 12% de la mortalidad general y en Venezuela un varón tiene 16,5 veces más posibilidades de ser víctima de homicidio que una mujer.

DC/Panorama