Carreteras de la muerte: Así está la autopista Valencia-Puerto Cabello donde asesinaron a Mónica y su esposo(Fotos)

Transitar por la autopista Valencia-Puerto Cabello es un riesgo a cualquier hora del día, pero cuando cae la noche aumenta el peligro, producto de la falta de iluminación en esta importante arteria vial que comunica la capital carabobeña con la costa.

Solo algunos ojos de gato, ubicados en ciertos tramos de la autopista, iluminan el camino a los conductores, pues los bombillos de los pocos postes de luz que existen, se quemaron desde hace algún tiempo y todavía esperan ser sustituidos por algún gobernante.

La oscuridad que reina en la zona se ha convertido en el aliado perfecto de la inseguridad. Solo tres puestos de control están ubicados en los más de 50 kilómetros de carretera, desde el distribuidor Bárbula en Naguanagua hasta la entrada de Taborda, en Puerto Cabello.

Precisamente, uno de ellos está en la entrada del sector Taborda; allí permanecen efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), adscritos al Destacamento 24; Armada Bolivariana; funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y del Instituto Nacional de Transporte Terrestre (Intt).

El otro está ubicado en el kilómetro 194, específicamente debajo del puente de El Cambur, donde -solo durante el día- están uniformados de la GNB adscritos al Destacamento 25, conjuntamente con los de la Armada Bolivariana. Y el tercero es conocido como el peaje La Entrada.

Como se acostumbra en temporada vacacional o en situaciones de tragedia, como la que se vive actualmente tras el asesinato de Mónica Spear y su esposo, se observa una que otra patrulla recorriendo la autopista. Son pocas las veces, para no decir casi nunca, que custodian la zona.

La poca presencia de cuerpos de seguridad ha traído como consecuencia que muchas personas sean víctimas del hampa, bien sea por caer en las trampas, sufrir daños mecánicos en sus vehículos o porque las autoridades no realizan el debido chequeo a las unidades de transporte público que en ocasiones son abordadas por aquéllos que se adueñan de lo ajeno.

En algunos casos se resulta ileso físicamente, pero lesionado psicológicamente al ser atacado; otros no han corrido con la misma suerte, pues o resultaron heridos de un disparo o los acribillaron a tiros.

Autopista fracturada

El pavimento de la autopista Valencia-Puerto Cabello, en ambos sentidos, está en completo deterioro producto de los derrumbes, la falta de mantenimiento y el constante flujo de vehículos de carga pesada que a diario circulan por esta vía.

A lo largo del trayecto se evidencian huecos, desniveles, fracturas y hundimientos, que obligan a los conductores a maniobrar y en consecuencia, arriesgar sus vidas y las de los pasajeros.

Por si fuera poco, las defensas viales están deterioradas y en algunos tramos ya no existen, debido a los golpes que han recibido cuando algún vehículo impacta contra ellas. La isla que divide ambos sentidos también está en mal estado.

Para completar el dramático escenario, la escasa señalización que existe está en malas condiciones, o la maleza impide que los usuarios descifren lo que allí dice.

A pesar de la grave situación, algunos conductores exceden los límites de velocidad y se aprovechan de la falta de vigilancia para hacer de las suyas.

Krisbelmar Pérez/Ysamar Galíndez / Notitarde