Familiares de González cuentan el calvario de un secuestro

Eduis José González (34) fue rescatado por efectivos del Cicpc entre las 3.00 y las 4.00 de la mañana en una zona enmontada del sector Burro Negro en Lagunillas. Por el hecho hay cinco personas detenidas, y tres más identificadas por los cuerpos policiales.

Juan Vargas, jefe de Occidente del Cicpc  informó que gracias a las labores de inteligencia, los funcionarios llegaron al lugar en el que permanecía González.

El jefe policial indicó que la banda está conformada por al  menos 15 personas, de las cuales al menos cinco son de nacionalidad colombiana. “Sabemos que esta banda está vinculada con otros secuestros en la zona, pero  nos mantenemos en las investigaciones”.

Los secuestradores detenidos quedaron identificados como Keny Valles (20), Yurguen Correa (28), Adrian Rodríguez (27), Luis Alfonso Menes (40) y Wilson Valles (36), mientras que” Joan”, “Brando” y Palacios Mena están evadidos.

El líder transportista indicó que durante su cautiverio lo mantuvieron al aire libre. “Por el día me acostaban en la maleza y me lanzaban cosas arriba para que nadie me viera, luego en las noches me permitían que me sentara. Todo el tiempo estuve amarrado con una cadena en el cuello”.

González reveló que durante su cautiverio los cuidadores lo mantuvieron en la zona, pero lo rotaban constantemente.

Sufrimiento de un secuestro

El calvario de la familia González comenzó el 11 de julio, cuando una banda delictiva dedicada al secuestro se llevó al líder transportista Eduis González, de su residencia en el sector Campo Maraca de Lagunillas.

La hija de nueve años de la víctima fue la primera en comenzar a sufrir, ya que fue ella quien llegó a la residencia poco después del rapto de su padre, y vio como otras personas que estaban en la vivienda a la hora del rapto estaban amordazadas.

“Ella llegó a la casa en mi compañía, y cuando entró vio a todos amarrados, luego spo que a su papá se lo habían llevado”, contó Karelis González, esposa de Eduis, durante la rueda de prensa en la sede del Cicpc.

Karelis explicó que los secuestradores la llamaron en tres oportunidades. “Me llamaron y me pidieron 500 mil bolívares, como no tenemos esa cifra comenzaron las negociaciones, llegaron a pedirme 300mil”.

La mujer explicó que con cada llamada de los delincuentes crecía más su terror. “Ellos me decían que si no les pagábamos me iban a matar a mi esposo, y me lo iban a descuartizar y a enviar los pedazos en bolsas negras”.

“Lo más difícil de tener a un familiar secuestrado es la incertidumbre, el no saber si lo volverás a ver con vida”, refirió la mujer.

Por su parte Eduis hizo un llamado a  todos los ciudadanos que están pasando por esta situación a confiar en los cuerpos policiales. “Yo al principio creí que la  policía complicaría más las cosas, pero me doy cuenta que si ellos no hubieran actuado aun estaría allá.

DC