La Conferencia Episcopal de Colombia calificó de atroz el asesinato del sacerdote de 48 años ocurrido el lunes por la tarde. Valle era párroco de un templo en Barranquilla (990 km al norte de Bogotá), indicó en un comunicado
Por su parte, el comandante de la policía de Barranquilla, general José Vicente Segura, dijo a la prensa que el cuerpo del sacerdote presentaba 17 puñaladas, y anunció una recompensa de 20 millones de pesos (unos 10.000 dólares) por información que permita capturar a los autores del crimen.
Monseñor Jairo Jaramillo Monsalve, arzobispo de Barranquilla, expresó su preocupación por este hecho (y) lamentó que la vida de cualquier persona y en particular la de un presbítero tenga ese desenlace, dijo el comunicado de la Conferencia Episcopal.
DC/ Agencias