La profundidad fue de 130 kilómetros y se sintió en lugares tan lejanos como Quito, la capital ecuatoriana y en algunas ciudades de Venezuela como Valencia y Caracas, informó el Servicio Geológico de Estados Unidos.
Hasta los momentos no se han registrado daños materiales ni pérdida de vidas humanas, se está a la espera de mayor información. Se espera que en las próximas horas se presenten réplicas.